Un reportaje que publica este domingo el semanario argentino “Perfil” ahonda en la “embajada paralela” que Argentina tenía en Venezuela a través de Julio de Vido y Claudio Uberti y denuncia que su contacto con el gobierno de Hugo Chávez era Alex del Nogal, hoy detenido en Italia.
PERFIL recorrió la sede desde donde Julio De Vido, a través de Claudio Uberti, manejaba las relaciones económicas con Venezuela. El nexo con ellos se llama Alex del Nogal, y hoy está detenido por trafico de drogas en Italia.
Su última visita a Buenos Aires fue días después del ingreso de Antonini Wilson y la valija. Es amigo de Kauffmann, Durán y Maiónica, los detenidos en Miami, y se convirtió en un playboy bolivariano.
En Caracas es vox populi.
Todos señalan las oficinas del cuarto pìso de la Torre Europa, en pleno centro de la capital venezolana, como “la embajada” donde el ministro de Planificación, Julio De Vido, gerenciaba la relación comercial de la Argentina con la República Bolivariana de Venezuela. Lo cierto es que, a pesar de haber pasado no más de un par de veces por allí, De Vido delegó esta importante relación comercial con su mano derecha, el despedido Claudio Uberti, quien luego de la aparición de Antonini Wilson con su valija repleta de dólares en la aduana de Buenos Aires, debió dejar su cargo al frente del Occovi (Organismo de Control de las Concesiones Viales) y refugiarse en lugares
Así, De Vido convirtió a Caracas en su sede principal para los negociados con el gobierno venezolano. Y su contacto allí, a través de Claudio Uberti, era Alex del Nogal, hoy detenido en una cárcel italiana por tráfico de drogas.
“Del Nogal era el contacto con el Gobierno argentino. Si uno quería contactarse con De Vido, Del Nogal te vinculaba con Uberti”, afirmó a PERFIL un empresario que prefirió mantener su nombre en secreto
“Uberti venía siempre. Cada dos meses. Te citaba en el cuarto piso del Europa”, continuó el empresario. En ese piso hoy funciona el Sistema Económico Latinoamericano y del Caribe (SELA), un organismo regional intergubernamental con sede en Caracas, creado en 1975 pero que, desde el arribo del chavismo al poder, se transformó en una de las principales cajas desde donde el gobierno venezolano canaliza los apoyos financieros a sus países aliados.
La sede. PERFIL recorrió ayer las oficinas del SELA, el lugar elegido por ambos países para que De Vido montara su embajada paralela. En la recepción su vocera, Xenaida Lugo, le dijo a este diario respecto de las visitas de De Vido y su gente: “No sé si se juntaban aquí, pero no descarto que hayan estado”.
Antes de ser detenido en Italia en septiembre de 2007, Del Nogal volvió cuatro veces más a la Argentina. “Mantenía reuniones con la gente de De Vido y se volvía”, aseguró a PERFIL un conocedor del entorno del “embajador” devidista. Su última visita oficial fue con una comitiva venezolana, en los preparativos de la Cumbre de las Américas en septiembre de 2005, como funcionario de PDVSA. Sin embargo, habría regresado en agosto de este año, en plena explosión del Valijagate. No estaba solo: se habría alojado en Bariloche, en el Hotel Llao-Llao, junto a Antonini Wilson y Jhonny Yánez Rangel, gobernador del Estado de Cojedes y principal defensor de los tres venezolanos detenidos.
Historia. En pleno auge de las relaciones bilaterales entre Venezuela y Argentina, Uberti se relacionó directamente con un grupo de empresarios “nuevos ricos” vinculados directamente con el negocio petrolero. A finales de los 90, un grupo de “golden boys”, encontró en el auge de la bolsa de valores el principal lugar para convertir los contactos en dinero. Carlos Kauffmann, Franklyn Durán, Guido Antonini Wilson y Moisés Maionica, acertaron con su olfato financiero y se convirtieron en millonarios.
Marco Walter Alexander nunca se acomplejó por sus kilos de más y supo moverse como un “verdadero playboy”. Así fue como conoció a Carlos Kauffmann y a su grupo de amigos. Se hizo famoso como Alex Del Nogal, y su gusto por la noche le trajo problemas. Hoy, Del Nogal está detenido en Italia luego de ser buscado por la Magistratura de Palermo, con base en una orden de captura emitida por la fiscalía , y acusado de tráfico internacional de estupefacientes. En el 2004 ya había estado detenido en Suiza por narcotráfico y lavado de dinero.
En Caracas, Julio De Vido manejó una “embajada paralela”
Reportaje de Juan Cruz Sanz
Perfil, Argentina
Ver también:
25-02-2007: “Los oscuros negocios entre Argentina y Venezuela“
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