viernes, 7 de diciembre de 2007

Sólo el general Gustavo Rangel Briceño defendió el plan de Hugo Chávez de alterar el resultado del referéndum


Sólo el general Gustavo Rangel Briceño, muy cuestionado por promover las milicias populares, defendió el plan de Hugo Chávez de alterar el resultado del referéndum en una reunión muy tensa en Fuerte Tiuna con jefes del Estado Mayor.

(Por Juan-Fernando Dorrego Tíktin)

Tres días claves

En tres días ha cambiado la historia de Venezuela quebrándose el proyecto totalitario de Hugo Chávez así como su plan hegemónico para América Latina, contestado por los líderes socialdemócratas Michelle Bachelet y Luiz Inácio Lula da Silva. Nuevas informaciones conocidas por Hechos de Hoy permiten reconstruir lo sucedido entre el domingo y el miércoles así como asegurar que el triunfo de la oposición no fue una "victoria de mierda" como calificó de forma tabernaria Hugo Chávez el resultado de 51% para el "No", 49% para el "Sí" y una abstención del 44%.

Los colegios electorales cerraron en Venezuela a las 16:00 pm (hora local) del domingo 2. A las 00:30 am de la madrugada del lunes 3, no se había facilitado ningún dato en un clima de enorme nerviosismo en el país. Durante todo ese tiempo sucedieron muchas cosas en Caracas. A las 15:00, la Dirección de Inteligencia Militar (DIM) hizo llegar a Hugo Chávez unos datos negativos que le hicieron montar en cólera.

El No ganó por un 58%

A las 17:00, encuestas independientes así como el escrutinio conocido en ese momento por el Centro Nacional Electoral (CNE) avanzaban de forma irreversible la derrota de Hugo Chávez y el triunfo de la oposición. Fue el momento elegido por los jefes de inteligencia cubanos en el Palacio de Miraflores para aconsejar que se filtraran dos encuestas a las agencias internacionales. Estas encuestas fueron realizadas por empresas chavistas. Su objetivo buscaba crear confusión en Internet así como en las ediciones de diarios europeos.

A las 19:30, Hugo Chávez convocó una reunión en Fuerte Tiuna con los jefes militares. Según informaciones de Hechos de Hoy, Hugo Chávez indicó a los jefes militares que no estaba dispuesto a reconocer su derrota. Los datos de la victoria de la oposición manejados en esa reunión señalaban un triunfo del No por un 58%.

Baduel tuvo más apoyos que Rangel Briceño

La situación llegó en ese momento a un clima de gran tensión. Al mismo tiempo el Consejo Nacional Electoral (CNE) expulsó a representantes de la oposición. El general Raúl Isaías Baduel, ex ministro de Defensa, recibió entonces información de la intención firme de Hugo Chávez de no aceptar su derrota. Comunicó a sus interlocutores que estaba dispuesto a anunciar los datos que estaban en su poder con la victoria del "No" por un 58%. En una declaración a la televisión, declaró que no podían aceptarse presiones que podrían causar "situaciones indeseables".

A las 21:00, Hugo Chávez insistía en no reconocer su derrota, aunque al conocer los apoyos al general Baduel, y la falta de autoridad del general Gustavo Rangel Briceño, pidió negociar un resultado que no le humillara. El mismo estableció el baremo de 51% para el "No" frente al 49% para calificar posteriormente el triunfo de los estudiantes de "victoria de mierda" y "victoria pírrica". Cuando todo estaba pactado, el Consejo Nacional Electoral hizo públicos los resultados tras conocer Hugo Chávez tanto la firmeza del general Baduel como la negativa de los jefes militares para sacar tropas y blindados a la calle.

Tormentosa conferencia en el Palacio de Miraflores

Las filtraciones que se han producido a lo largo del martes 4 de lo sucedido en Fuerte Tiuna hicieron montar en cólera de nuevo a Hugo Chávez el miércoles 5. Exigió al general Gustavo Rangel Briceño que desmintieras las presiones de los jefes militares en una conferencia de prensa en el Palacio de Miraflores.

Fue en esa agitada conferencia de prensa en la que intervino de nuevo para anunciar un nuevo referéndum que abra la puerta al modelo cubano que fue rechazado. Sus amenazas y sus planes no ocultan ya su decisión de buscar una confrontación con la sociedad que lo derrotó. Tanto el general Baduel como los líderes estudiantiles son conscientes de los retos que van a poner ante su prueba más dura a las ejemplares instituciones republicanas de Venezuela. Se abre así un incierto escenario en que los altos jefes militares, la élite de un Ejército muy profesional, ya han mostrado que no comparten las tesis del círculo castrense que rodea a Hugo Chávez y que encarna el general Rangel Briceño.

http://www.hechosdehoy.com/

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo lo que creo es que Chavez está perdiendo piso y no empieza a saberlo. Este es un muy buen análisis: http://innova70.blogspot.com/2007/12/el-poder-te-ciega-o-no-hugo.html

Eriu Brighid dijo...

Ese general tiene cara de haberse fumado una apio al revés.