Terminó en Miami la audiencia prevista para hoy en el Caso Antonini. Kauffman y Maionica comparecieron ante la Juez pero ninguno de ellos habló. Dejaron que lo hicieran sus abogados quienes declararon “inocentes” a sus clientes rechazando los cargos de que eran agentes del Gobierno de Venezuela.
El proceso seguirá ahora su curso.
Información anterior:
Dos de los implicados en la causa del Caso “Antonini” deberán declarar esta mañana ante una jueza de una corte de Miami. El Fiscal cuenta con 13 grabaciones que pueden ser claves en el caso.
Se trata de Carlos Kauffman, quien vinculó el destino de los fondos con la campaña presidencial de Cristina Kirchner, y el abogado Moisés Maionica, quien ha sido vinculado con el ex-VicePresidente de Venezuela Jorge Rodríguez.
El implicado, según reseñó Clarín, deberá comparecer ante la jueza Andrea Simonton, miembro de la corte Federal de Miami. Además de Anotonini, otros acusados son el agobado Moisés Maionicia, el venezolano Franklin Durán y el uruguayo Rodolfo Wanselee. Estos dos últimos ya se declararon inocentes.
Kauffman, contra quien se formularán cargos formales, deberá dar mayores precisiones sobre el origen del dinero y el porqué fue traído a la Argentina. Junto con él también deberá comparecer Maionica.
Ellos dos podrán declararse inocentes o, si confiesan su culpabilidad, podrían tener una pena menor, un vez terminado el proceso.
El argentino Clarín aporta hoy más información sobre la audiencia:
Durante esa audiencia, que comenzará puntualmente a las 10, hora local, dos de los cuatro detenidos, Carlos Kauffman y Moisés Maionica serán acusados formalmente de haber conspirado para encubrir el destino de los 800.000 dólares que el venezolano Alex Guido Wilson Antonini intentó ingresar a la Argentina en agosto pasado, y fue detenido en el Aeroparque. Ambos tendrán la opción de declararse culpables o inocentes.
Una fuente judicial en Miami dijo a Clarín, sin embargo, que lo más probable es que Kauffman y Maionica se declaren inocentes y que argumenten de que no hay evidencias contra ellos. Más aún, la fuente no descartó que ambos afirmen, o al menos Kauffman, que la falta de pruebas sugiere que el gobierno de Estados Unidos está utilizando este caso políticamente en contra del presidente venezolano Hugo Chávez.
De hecho esta es la estrategia que ya adoptó, Edgard Shohat, el abogado defensor de otros de los acusados, Franklin Durán, durante una audiencia que tuvo lugar el 27 de diciembre pasado para rechazar los cargos que el fiscal tiene contra él.
En una moción presentada un día antes de esa audiencia pidiendo la revocación de la detención de Durán, Shohat afirma que este caso “no tiene nada que ver con Estados Unidos (…) La falta de relación con Estados Unidos y los acontecimientos que subyacen en este caso lo colocan a millas de distancias de otros ‘casos 951′ (conspiración en territorio de EE.UU.) y sugiere fuertemente un posible motivo político: impulsar la decisión de la política exterior de Estados Unidos destinada a avergonzar al gobierno de Venezuela“.
Más aún a pie de página el abogado defensor recuerda que el “Departamento de Justicia ha sido muy criticado por politizar los casos criminales y otros asuntos como fue el despido de los fiscales.
Incluso el 24 de diciembre el Daily Business Review publicó un comentario parecido en el Nation Law Journal titulado “Paren los abusos procesales en nombre de la justicia”. Citan audiencias que tuvieron lugar en el Congreso que revelaron detalles muy chocantes de “persecuciones motivadas políticamente”.
Si Kaufman y Maionica se suman a la estrategia de politizar el caso de Durán, los tres se transformarán en los únicos aliados que tiene el gobierno de Cristina Kirchner en Estados Unidos desde de que la presidente declaró que todo el procedimiento era “un operativo basura”.
El desafío legal del fiscal Tom Mulvihill, es demostrar lo contrario. Mulvihill tiene tiempo hasta el 11 de enero para reunir todas las pruebas que tiene contra Durán, grabaciones, filmaciones y llamados telefónicos. Durán podrá entonces optar nuevamente por declarase culpable y hacer un arreglo. Pero si no lo hace, Mulvihill deberá demostrar que Durán trabajaba para el gobierno de Venezuela. Si bien no es necesario que demuestre el origen y el destino del dinero, los ochocientos mil dólares estarán presentes durante todo el juicio.
La relación bilateral entre Argentina y Estados Unidos dependerá hasta cierto punto de la evolución de juicio. Los halcones, de un lado como del otro, sobrevuelan esa relación de tal manera que será muy difícil que las palomas intenten otra vez un acercamiento en un futuro inmediato.
Incluso si el fiscal Mulvihill llega a tener pruebas suficientes para condenar a los cuatros detenidos, el caso no estará cerrado hasta que Argentina no realice una seria investigación por su cuenta.
Estas serían, según el mismo diario, las 13 grabaciones claves con que cuenta el Fiscal:
1 > 23 de agosto: Compartiendo una mesa en el elegante “Jackson’s Steakhouse” de Fort Lauderdale, Franklin Durán le cuenta a Antonini que, según lo que había conversado con altos funcionarios de inteligencia y del ministerio de Justicia venezolanos, los 800 mil dólares confiscados en Aeroparque iban para la campaña de Cristina Kirchner. Pero le advierte que la pasaría mal si no se hace cargo del dinero como si hubiera sido suyo. En la misma velada, Carlos Kauffman le insiste al Gordo que en Venezuela están dispuestos a ayudarlo. Moisés Maiónica agrega que la petrolera PDVSA correría con los gastos de su defensa.
2 > 27 de agosto: En una nueva comida en el “Jackson’s Steakhouse”, Durán le comenta a su socio y compañero de rally que el asistente de un alto funcionario de PDVSA fue el que subió la valija repleta de dólares al avión y que hay “personas” en Venezuela y Argentina que quieren resolver su problema sin que se sepa la verdad. Fue en esta reunión en la que, invitado por Maiónica, participó el ex camarista Guillermo Ledesma para asesorar a Antonini sobre cómo encarar la defensa ante la Justicia argentina.
3 > 29 de agosto: Durán le pide por teléfono a Antonini que le envíe un poder para buscarle un abogado y le asegura que la cúpula del gobierno venezolano se está encargando de su asunto.
4 > 7 de septiembre: Al regresar de viaje, Durán se reúne con Antonini en el restaurante “Quarterdeck” de Fort Lauderdale y lo sorprende con una novedad que casi atraganta al Gordo. “El gobierno venezolano no confía en ti y sospecha que estás colaborando con las autoridades norteamericanas”, le revela. “Puede llegar un momento en que nadie te pueda salvar el pellejo”, le advierte.
5 > 16 de setiembre: En una conversación telefónica, el abogado Maiónica le revela a Antonini que fueron personas de la oficina del vicepresidente venezolano y la DISIP (la SIDE del país caribeño) quienes le pidieron que se encargara de asistirlo jurídicamente.
6 > 25 de setiembre: Maiónica llama a Antonini Wilson para decirle que para resolver el asunto sólo le queda una reunión más con “el hombre número dos” que recién regresó a Venezuela.
7 > 4 de octubre: Maiónica le avisa a Antonini que le enviarán un emisario en misión confidencial para que termine de acordar con él las condiciones para participar de la conspiración que pretende ocultar el origen y el destino reales de los 800.000 dólares que volaron de Caracas a Buenos Aires.
8 > 27 de octubre: En tres llamados telefónicos, Maiónica le da instrucciones al Gordo sobre el encuentro con el “emisario” venezolano. Le explica que utilizarán como contraseña para reconocerse el nombre “Cristian” (un amigo en común de Antonini y Maiónica) y que deberán moverse unos metros del lugar de contacto para conversar reservadamente.
9 > 28 de octubre: El uruguayo Rodolfo Wanseele Paciello conduce a Antonio José Canchica Gómez, supuesto agente de inteligencia venezolano, hasta la cafetería “Starbucks” de Plantation, a 50 kilómetros de Miami, donde se encuentra con Antonini y utilizan el nombre “Cristian” para reconocerse. Canchica le explica que viajó para confirmar toda la operación, ya que él es “el último eslabón de la cadena”. Allí mismo, le pide a Antonini que le firme un poder y confíe en que será asesorado con mucha discreción por expertos juristas.
Durante la reunión, Wanseele estuvo de “campana” controlando que nadie los vigilara (está a la vista que no fue muy eficiente en ese menester) y luego llevó a Canchica a su hotel. Para despistar, dieron vueltas por más de una hora para un trayecto que puede realizarse en 10 minutos por una ruta directa.
10 > 6 de noviembre: Maiónica le avisa al Gordo que recibirá una llamada del director de la DISIP, quien utilizará el alias “Arvelo”. A las 4.16 de la tarde, suena el teléfono de Antonini. El tal “Arvelo” le informa que está al tanto de sus preocupaciones a través de Canchica y que se está encargando del asunto.
11 > 18 de noviembre: En un nuevo llamado, “Arvelo” le avisa a Antonini que Maiónica está viajando a Miami para explicarle la estrategia acordada para el encubrimiento.
12 > 30 de noviembre: Maiónica y Antonini se encuentran a almorzar en el Restaurante italiano “Bravo” de Fort Lauderdale. Maiónica le confirma que todo el encubrimiento y su propia participación fueron gestionados por la DISIP y un alto funcionario del gobierno venezolano.
13 > 11 de diciembre: En la última cena en el “Bravo”, Durán y Maiónica le entregan a Antonini tres documentos que servirían como coartada para encubrir el origen y el destino de la célebre valija. Eran las pruebas que faltaban. Al salir del restaurante, el ex socio del Gordo y el abogado venezolano son detenidos. Esa misma noche, son arrestados en Miami Kauffman y Wanseele.
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