Otro preso político: Julio Ribas (JAVU)

A solicitud del Ministerio Público, fue privado de libertad Julio César Rivas Castillo, de 22 años, estudiante de la Universidad Alejandro Humbolt de Carabobo, quien fue detenido la noche de este lunes.

La detención se produjo por presuntamente protagonizar hechos violentos ocurridos durante la marcha convocada por la oposición el pasado 22 de agosto en Caracas.

Los fiscales 20° nacional y 20° del Área Metropolitana de Caracas, Daniel Guédez y Daisy Bolívar, respectivamente, imputaron a Rivas Castillo, por la presunta comisión de los delitos de instigación a delinquir, resistencia a la autoridad, excitación a la guerra civil y uso de arma genérica, previstos en el Código Penal.

El Tribunal 27° de Control de Caracas, donde se llevó a cabo la audiencia de presentación, acogió la calificación fiscal y fijó como sitio de reclusión el Internado Judicial de El Rodeo I, en Guatire, estado Miranda hasta tanto el Ministerio Público presente el acto conclusivo en el lapso correspondiente.

Por estos mismo hechos se encuentra detenido Richard Blanco, quien fue imputado el pasado 29 de agosto por presuntamente incurrir en los delitos de lesiones graves e instigación a delinquir.

Por el delito de resistencia a la autoridad e instigación a delinquir días antes fue imputado Pablo Emilio Palacios, manifestante que fue detenido mientras el Ministerio del Poder Popular para las Relaciones Interiores y Justicia, Tarek El Aissami, ofrecía declaraciones sobre los hechos suscitados al final de la manifestación.

Como se recordará el pasado sábado 22 de agosto, se generaron hechos violentos en la avenida Libertador de Caracas, donde personas que participaban en la marcha derribaron la barrera que tenían dispuesta los organismos de seguridad, para luego proceder a arremeter con objetos contundentes contra los funcionarios.

De acuerdo con imágenes transmitidas a través de un canal de televisión, se observaron personas, que participaban en la marcha de la oposición protestando contra la Ley Orgánica de Educación, rompiendo las barras de seguridad y lanzando objetos contundentes a los policías metropolitanos, quienes activaron los mecanismos de rigor para restablecer el orden público.

Las autoridades habían establecido que la marcha de oposición partiera de la avenida Francisco de Miranda, a la altura del Centro Lido, y debía terminar en la avenida Libertador, exactamente en el edificio que sirve de sede a la Compañía Anónima Nacional Teléfonos de Venezuela (Cantv).

Vía Nota de Prensa de la Fiscalía

Chávez: nunca más

La especie humana pidió la palabra. Frente a la pretensión hegemónica de Hugo Chávez, de tratar de imponerle al mundo contemporáneo sus métodos atroces de seducción y manipulación política. Miles de personas en los cinco continentes, salieron a las calles a protestar al primer magistrado venezolano. Jamás en la historia viva de América latina, un presidente logró semejantes índices de rechazo colectivo. En la colección de las peores calamidades públicas, que nacieron entre el río bravo y la Patogonia, muy pocos se pueden equiparar con el sueño totalitario del héroe del museo militar.

Es una portentosa máquina para construir mentiras. Que hacen más llevadera la carga eterna de los pobres. Ellos, representan, las mejores víctimas para aquellos que se han lucrado con las miserias de las mayorías. En el nombre de la redención socialista, asaltaron al Estado, y de paso lograron arrimarle la culpa al imperio norteamericano, una estratagema que le brindó excelentes resultados en el pasado.

Magnifica la puesta en escena. Las calles de más de ciento cuarenta ciudades en el mundo, escucharon la voz de ciudadanos que defienden los principios democráticos, frente al regreso de la barbarie del siglo XIX.

Qué vergüenza para los venezolanos saber, que mientras el planeta premia a Gustavo Dudamel y al maestro José Antonio Abreu. Vibra con la perfomance de sus deportistas, celebra el triunfo de Estefanía Fernández en el Miss Universo. Su presidente es repudiado por haberse constituido en una amenaza para la humanidad. Una especie de dinosaurio del parque jurásico, que desgarra a sus víctimas con la fuerza inconmensurable del odio por su oponente.

Hugo Chávez libra una dura batalla. Quiere traer de vuelta al llamado socialismo real; desea colocar los nuevos adoquines de su particular muro de Berlín. Romperles el alma a sus contrarios, es su pretensión. Las ideas que encarna, significan la instauración de un régimen que conculca los principios básicos de libertad y democracia.

Para librarse de está pesadilla marchó el mundo. Dejó escrito un mensaje que denota esperanza. Detrás del flagelo que carcome las bases democráticas del continente, surge una idea luminosa. Nunca más debemos escuchar el canto de las sirenas. Colocar nuestros sueños en opciones lunáticas, es un grave peligro. Dejarnos seducir por aquellos que ofrecen el paraíso como salida, es tan peligroso como colocar fuego sobre un barril con pólvora.

Hugo Chávez sigue su camino directo al precipicio. Todavía debe de estar analizando la contundente demostración de los ciudadanos del planeta. Así como la inmensa marcha del pasado sábado en las calles de Caracas. En cambio, sus acólitos apenas pudieron reunir cuadra y media de gente. Su pervertida chequera petrolera jamás podrá comprar la dignidad de millones de personas.

La grosera intromisión de Hugo Chávez en los asuntos internos de otros países, hace palidecer la historia patria. Cuando nuestros héroes recorrían los densos territorios del hemisferio, llevaron libertad. Don Andrés Bello hizo que Chile se transformara en paraíso del idioma español. Ahora las diversas sociedades tienen que soportar las ínfulas de un hombre que se cree con el derecho de inmiscuirse en sus asuntos. Es por ello, que millones de personas lo colocan en el área de los explosivos ideológicos más peligrosos.

Ojalá que los venezolanos terminemos con esta pesadilla. Qué tristeza es saber que el mundo nos compadece.


Alexander Cambero
El Universal