domingo, 27 de julio de 2008

Izquierda radical o "populista" no marcha bien en Latinoamérica


Los mandatarios de la región que han promovido la izquierda radical no salen bien librados en el Barómetro Iberoamericano de Gobernabilidad. Foto: AP





La izquierda radical o "populista" no marcha bien en Latinoamérica. Eso es lo que se puede extraer de la última encuesta del Iberobarómetro, conocido por CAMBIO. El estudio concluye, por ejemplo, que los presidentes Hugo Chávez, de Venezuela, y Evo Morales, de Bolivia, gozan de muy poca simpatía entre los latinoamericanos, quienes les estarían cobrando sus posturas extremas. Ambos mandatarios, al igual que el nicaragüense Daniel Ortega, presentan caídas muy agudas en los niveles de aceptación en sus respectivos países.

En contraste, líderes de la llamada "izquierda democrática", como Brasil y Chile, sobresalen en los niveles de aceptación en la región. Mientras Álvaro Uribe, quien tiene una aceptación interna que supera el 82 por ciento, convirtiéndose en el presidente más popular de los últimos años, aún sigue sin poder expandir su buena imagen al resto de los países latinoamericanos.

El estudio, realizado por el Consorcio Iberoamericano de Investigaciones de Mercados y Asesoramiento (CIMA), entrevistó a 12.401 personas en Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Estados Unidos (latinos), El Salvador, España, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Portugal, Puerto Rico, República Dominicana, Venezuela y Uruguay.

El Iberobarómetro, además, marca algunas tendencias interesantes en otras áreas. Por ejemplo, Latinoamérica es la región del mundo en donde el porcentaje de quienes consideran que están gobernados por la voluntad del pueblo (41 por ciento), supera a otras, como Europa occidental y África, donde el 38 y 34 por ciento, respectivamente, piensan de esa manera. También se resalta que los latinoamericanos tienen una percepción favorable acerca de los procesos electorales. Hace dos años solo el 34 por ciento pensaba que las elecciones eran justas y limpias, mientras que en 2007 la proporción subió a un 46 por ciento. Así mismo, es alto el porcentaje -un 80 por ciento- de latinoamericanos que cree en la democracia como sistema de gobierno.

Sin embargo, y a pesar de lo anterior, tanto el Congreso como los partidos políticos, pilares de ese sistema, no salen bien librados. Solo el 24 por ciento de los ciudadanos confía en el Congreso de su país y el 14 por ciento tiene seguridad en los partidos políticos.

En el estudio son las instituciones civiles las que cuentan con mayor prestigio, destacándose la Iglesia y la educación, con el 64 y 61 por ciento, seguidos de los noticieros con 55 por ciento y la prensa con 48 por ciento. Llama también la atención el hecho de que en lo que tiene que ver con los actores e instituciones internacionales que pueden ayudar en situación de crisis a sostener la gobernabilidad, los latinoamericanos se sienten más cerca a China y Europa que a EE.UU. La Unión Europea logra una aprobación del 48 por ciento y China un 41 por ciento, mientras que la imagen de Estados Unidos solo es aprobada por el 34 por ciento.

Las instituciones internacionales que sobresalen son Naciones Unidas, respaldadas por el 57 por ciento; Mercosur, con el 44 por ciento, y la OEA, con un 40 por ciento de aceptación. (ver gráfico)

Terrorismo, desempleo y corrupción

En cuanto a los problemas graves de la región, el terrorismo ocupa lugares importantes especialmente en Colombia y España con un 27 y un 30 por ciento, respectivamente, estando por encima de la inseguridad, el desempleo y la corrupción, que se califican como los más preocupantes en el resto de los países medidos. Y aunque en todos se han implementado programas para combatirlos, es solo en Panamá, Colombia y Argentina en donde sus nacionales aprueban en más de un 50 por ciento las gestiones de sus presidentes al respecto. Después de España y El Salvador, que presentan porcentajes de entre 30 y 50 por ciento, los demás están por debajo del 30 por ciento.

El tema de la economía y el desempleo sigue siendo una de las inquietudes de los latinoamericanos. Se resaltan El Salvador, en el que el 55 por ciento de ciudadanos lo califican como el más grave, y el de los hispanos en Estados Unidos, en donde el 50 por ciento lo ve alarmante.

En 17 de los 21 países estudiados, la gestión de los presidentes frente a este tema no alcanza en ninguno más del 30 por ciento. Tal vez por eso la medición del estado de ánimo de los latinoamericanos, que se relaciona directamente con la situación económica, ha bajado tres puntos desde al año pasado. En 2007, el 74 por ciento de los ciudadanos consideraba que la situación se quedaría igual o mejoraría. Este año la cifra es de 71 por ciento y se debe, según el informe, a la desaceleración en Estados Unidos por el alza del petróleo, los créditos hipotecarios y el temor a la crisis financiera.

En cuanto a la corrupción, según el estudio, el manejo de los presidentes ha mejorado, destacándose el caso de Panamá, en donde el 81 por ciento de sus ciudadanos está satisfecho con el desempeño de su presidente. Lo sigue Argentina con el 62 por ciento, Colombia con el 57 por ciento y Uruguay con el 52 por ciento. Sin embargo, aún falta más por hacer, ya que en los otros 15 países (incluyendo Puerto Rico, así como los hispanos en Estados Unidos), más del 50 por ciento de la población considera que el manejo que su gobernante le da al problema es malo o muy malo.


Calificación presidencial

En lo que tiene que ver con la calificación de los presidentes se destaca el caso de Hugo Chávez, quien según las cifras del barómetro ha perdido mucho respaldo en los últimos meses. En la actualidad, solo el 26 por ciento de los latinoamericanos lo ve con buenos ojos, casi los mismos niveles que tiene Bush, quien ocupa el penúltimo lugar entre todos los mandatarios evaluados. (ver gráfico)

Como era previsible, es en Colombia, Estados Unidos y México donde tiene menos admiradores, con tan solo el 15 por ciento en cada uno de estos países. Lo curioso es que ni siquiera levanta cabeza en países dirigidos por gobiernos de la llamada "izquierda radical o populista", pues en Bolivia, Ecuador y Nicaragua no supera ni el 35 por ciento, mientras que en los gobernantes "moderados", como Brasil y Chile, están por debajo del 30 por ciento.

Internamente a Chávez tampoco le va bien, pues de acuerdo con el barómetro, entre abril de 2005 y mayo de 2008, la aprobación de su gestión entre los venezolanos cayó 10 puntos, del 57 al 47 por ciento. Chávez obtiene sus peores registros en temas como el desempleo, la lucha contra el terrorismo y la corrupción, donde cuatro de cada cinco venezolanos desaprueban su gestión.

A Evo Morales, socio político de Chávez, tampoco le va muy bien. En el sondeo, el 31 por ciento de los hispanoamericanos lo ve con buenos ojos y en ningún país se acerca al 50 por ciento. En Venezuela, por ejemplo, tan solo obtuvo el 37 por ciento de aprobación.

Pero lo más grave para Morales son sus números internos, ya que entre marzo de 2006 y mayo de 2008 la aprobación de su gestión se desplomó casi 30 puntos al pasar del 61 al 35 por ciento, siendo sus puntos más débiles el manejo de la economía y el desempleo. Es evidente, además, que la pelea con las regiones por los referendos de autonomía y la reforma constitucional que propuso, han menguado su popularidad, pues la caída más grande se ve entre junio de 2007 y mayo de 2008, cuando perdió 14 puntos porcentuales.

La encuesta no presenta muchas estadísticas sobre la gestión de Daniel Ortega en Nicaragua y Rafael Correa en Ecuador, quizá porque ambos llevaban un poco más de un año en el poder al momento de realizar las mediciones. Pero, al menos en el caso de Ortega, el Iberobarómetro muestra que únicamente un 29 por ciento de sus conciudadanos ve con buenos ojos su gestión. En cuanto a Correa la encuesta lo ubica en el quinto lugar, entre los 20 líderes evaluados, con un 56 por ciento, pero cuando llegó a la Presidencia, en diciembre de 2006, sus números superaban el 60 por ciento.

Pero así como es marcada la antipatía en la región contra los "radicales", es acentuada la popularidad de la izquierda democrática que representan Luis Inacio "Lula" da Silva en Brasil y Michel Bachellet en Chile. 'Lula' ocupa el primer lugar entre las preferencias con casi el 54 por ciento, y en 10 países de los 20 en los que se preguntó (Colombia, Portugal, México, Venezuela, España, Chile, Bolivia, Ecuador, Argentina y Uruguay) su margen supera el 50 por ciento. Internamente, también aparece bien posicionado con el 51 por ciento de aprobación, su mejor marca desde agosto de 2003, cuando apenas registraba el 35 por ciento. De hecho, la tendencia de 'Lula' en los últimos cinco años ha sido de ascenso.

El caso de Bachellet es un poco diferente. Tiene, relativamente, buena imagen entre los latinoamericanos (45,9 por ciento) pero anda de capa caída en su país. Del 71 por ciento de aprobación en 2006 ha caído al 26 por ciento.

Uribe y Bush

Curiosamente Álvaro Uribe no tiene en el exterior el mismo respaldo que recibe por parte de los colombianos. En efecto, mucho menos de la mitad de los encuestados ¿el 41,8 por ciento¿ simpatiza con el mandatario y solo en un país, Paraguay, su aceptación supera la media tabla. Ni siquiera en E.U. supera el 50 por ciento, pues alcanza el 49,4.

También es claro, según la encuesta, dónde Uribe tiene sus mayores detractores. En Argentina y Ecuador solo uno de cada cuatro ciudadanos lo respalda, mientras en Brasil y Nicaragua está por debajo del 33 por ciento. La excepción ¿muy notoria¿ es Venezuela, donde el 47,7 por ciento lo tiene en buena estima y va en contraste con los números que Chávez registra en Colombia, donde solo el 15 por ciento lo apoya.

El Barómetro también confirma que Uribe continúa en romance con los colombianos, pues un 78 por ciento aprueba su gestión (la encuesta fue realizada antes de la Operación Jaque). El desempleo es el área que más le critican a Uribe, una constante desde enero de 2003, cuando el barómetro hizo la primera medición. (ver gráfico)

En lo que tiene que ver con George Bush, su popularidad en Latinoamérica siguió por el piso. De hecho, de los evaluados fue el peor calificado con el 23,9 por ciento de simpatías. Su fuerte, y en eso no hay muchas sorpresas, estuvo en Colombia, donde el 56 por ciento se mostró favorable.

Entre los hispanos de EE.UU. el 46,2 por ciento dijo simpatizar con su persona pero, a la hora de evaluar su gestión, los estadounidenses le dieron las peores marcas: únicamente un 13 por ciento dijo aprobarla, y de los 11 indicadores presentados solo en educación tuvo números por encima del 50 por ciento. De resto, y en temas como el desempleo, la economía, la corrupción y las relaciones internacionales, no pudo superar ni el 20 por ciento.







Revista Cambio, Colombia

http://www.cambio.com.co/mundocambio/786/ARTICULO-WEB-NOTA_INTERIOR_CAMBIO-4393010.html




1 comentario:

Anónimo dijo...

Por el arte y por un pueblo que sufre, que no elije, que no se levanta…para un pueblo, para un pueblo perseguido, para un pueblo sin blogs… para un pueblo sin voz:

Una rumbita se armó,
una fea carcajada.
Incombustible no sos,
cómo bancás ese infierno?
defendes la hoguera donde siempre
sos la leña.
Cuánto tiempo más vas a estar
esclavizado así,
refugiado en tu soledad?
Esto se hunde a fondo,
a fondo…
Estás tomando de más
y estás tolerando todo.
hoy llora tu corazón
la revolucion te ha abandonado.
Quedaste mordiendo el aire,
solo y sin dolor.
Cuánto tiempo más vas a estar
escavizado así,
refugiado en tu soledad?
con tu tortura en la TV,
siempre así.

¡Abajo la tirania comunista!
¡Viva Cuba Libre!

Gracias a los pueblos libres del mundo por regalarnos el espacio en este 26 de julio, un año màs de represiòn y opresiòn en contra del pueblo cubano